Sobre robots gigantes y monstruos marinos

No fueron pocos los que vaticinaron un sonoro fracaso cuando el realizador mexicano Guillermo Del Toro anuncio su siguiente proyecto tras Hellboy: El Ejercito Dorado. Nada mas y nada menos que mechas (robots gigantes) enfrentándose a monstruos de similar tamaño. A priori, un obstáculo mayúsculo para que los productores aprobasen el presupuesto del film y comenzase el rodaje.

pacific-rim-101

Con la inmensa campaña de publicidad que llevó consigo, empece a ver ciertas similitudes entre esta Pacific Rim y una de las grandes obras maestras que ha dado la animación japonesa, Neon Genesis Evangelion. Por ahí la cosa apuntaba maneras, siempre me ha gustado la ciencia ficción, la temática propia de obras como Mazinger Z, Patlabor, la citada Neon Genesis Evangelion o la saga Gundam se ha encontrado siempre entre mis predilecciones, y, que narices, tenia fe en Guillermo del Toro al frente del largometraje. El respeto y fidelidad que demostró por el cómic de Mike Mignola al trasladar su obra a la gran pantalla con el binomio del demonio rojo eran motivos mas que suficientes como para tenerme aguantado colas kilométricas en la taquilla del cine llegado el momento.

Para aquellos que aun no la conozcan, os diré que la cinta nos sitúa en una época en la que terribles monstruos surgidos de las profundidades del océano, llamados Kaijus, inician la conquista de nuestro planeta, llevándose consigo innumerables vidas. Debido a esto, las principales naciones del mundo destinan todo su poder económico de forma conjunta para contrarrestar dicha amenaza por medio de la creación del arma definitiva, enormes robots, aquí llamados Jaegers, pilotados de forma simultanea por dos pilotos mediante un enlace neuronal previo. Al borde del Apocalipsis, la ultima esperanza de nuestra raza serán dos héroes de lo mas dispares: un ex-piloto de Jaeger ya en decadencia (Charlie Hunnam) y una aprendiz que aun no ha sido puesta a prueba (Rinko Kikuchi).

Por razones que escapaban a mi control, me vi obligado a posponer el visionado de la cinta hasta hace muy poco tiempo, momento en el cual ya había sido puesta a la venta en diferentes formatos para el mercado doméstico. Como dictan los cánones, me dispuse a verla con las pertinentes palomitas de maíz, algún que otro refrigerio, luces apagadas y un home cinema a un volumen medio-alto, todo ello rodeado de la calidez y tranquilidad que solo puede aportar el hogar propio.

pacific-rim-alien

Que nadie se espere una obra maestra imperecedera o la panacea que dará que hablar durante décadas. Aquí se consigue el fin último que debe tener toda película: entretener. Un despliegue de efectos especiales estratosférico durante 2 horas y 11 minutos. Desde los mismos títulos de crédito, en el que Del Toro nos pone en situación con un prólogo que, particularmente, me encantó. Pero es que no es solo eso, aquí se une todo aquello que podríais imaginar dentro de un blockbuster veraniego. Con un desarrollo de personajes bastante plano, si, pero que mas da, nos lo vamos a pasar en grande imaginándonos dentro de un ser de metal de 60 pisos de altura.

Porque la película no es mas que eso, un espectáculo superlativo donde la acción es la nota predominante. Un homenaje absoluto a la cultura del manganime japonés con un toque occidental. Un magno divertimento que hará las delicias de aquellos que peleaban con sus muñecos durante la infancia. Recomendada con creces para esos que estén ansiosos por hacerse con una copia de Titanfall para la nueva consola de sobremesa de Microsoft. De esas películas que da gusto volver a ver de vez en cuando, porque no molesta lo mas mínimo. Allí donde, por similitudes evidentes, la saga Transformers de Michael Bay no me supo transmitir, Pacific Rim aparece y se cuela entre uno de esos placeres culpables que todos y cada uno de nosotros tenemos.

Frikis del mundo, regocijaos y alzad vuestras manos en señal de victoria, aquí tenéis la respuesta a vuestras plegarias.

4 Respuestas a “Sobre robots gigantes y monstruos marinos

    • Cierto Ruth, ahora es la época de calentarte la cabeza al salir del cine, demasiadas películas con cierto toque Nolan he visto pasar ya por las carteleras. Se agradece una película como esta, cuya única pretensión es divertir a todos los públicos.

      Me gusta

  1. Quizá sea que me hago mayor, pero últimamente me pasa que me aburro en el cine, incluso con películas que se autodenominan «de entretenimiento». Eso me parece un crimen. Si perdemos hasta eso no nos queda nada. Sin embargo, Guillermo del Toro da en el clavo con Pacific Rim: pura diversión sin prejuicios ni complejos. Recomendadísima para pasar un rato vibrante.

    Le gusta a 1 persona

    • De hecho, creo que a Del Toro le dejaron hacer y deshacer a su antojo. A pocos directores les dejarían «jugar» con un presupuesto de 100 millones de dolares para filmar este capricho personal. Pero bravo por él, y por nosotros que lo disfrutamos.

      Me gusta

Are you talking to me?

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s